El Liverpool dejó la oportunidad de matar al Villarreal.

Salió vivo el Villarreal de Anfield 

Por Dan Torres

En un partido que se inclinó de un solo lado el FC Liverpool en su propio estadio Anfield, conocido así por el barrio que se encuentra en la ciudad inglesa, dejó ir la posibilidad de matar completamente las esperanzas del club español Villarreal, que parece que sólo salió a defenderse de los constantes ataques de la escuadra inglesa en el partido de ida de la otra semifinal de la UEFA Champions League.

Para darse una idea y para quienes no tuvieron la oportunidad de ver el partido, los dirigidos por Jürgen Klopp tuvieron la posibilidad de anotar una gran cantidad de goles ya que el equipo español nunca atacó la portería de los reds pues el portero de esta escuadra sólo tuvo una vez la pelota durante todo el partido.

Desde mi punto de vista el Liverpool le perdonó la vida al Villarreal pues lo que pudo haber sido un marcador abultado con la posibilidad de convertirse en una goliza quedó sólo en un 2-0 a favor de los ingleses. Desafortunadamente para el equipo de la Premier League de todas las continuas llegadas la mayoría no terminó en gol debido a la buena actuación del portero Gerónimo Rulli que a mi parecer fue el héroe del partido y quien tiene aún al Villarreal con la esperanza de remontar ya en su casa, en el Estadio de la Cerámica en el segundo encuentro que se llevará a cabo el próximo 3 de mayo.

La realidad es que si el submarino amarillo vuelve a jugar en su terreno como lo hizo hoy en Anfield poca posibilidad tendrá de aspirar a la final de la Champions y no creo que el Liverpool se apiade nuevamente del equipo español.

El juego se tornó rojo y los dos goles cayeron en pocos minutos casi uno tras el otro. Tanto cae el cántaro al agua hasta que se rompe y al minuto 53 del segundo tiempo por tratar de tapar un disparo el defensor del Villarreal, Pervis Estupiñán, introdujo el balón en su propia portería en un claro autogol.

Dos minutos después, al minuto 55, Sadió Mané anotó el segundo gol de los reds y con el cual se cerró el marcador ya sin goles en el resto del partido. Hubo algunas pinceladas incluso la más clara un disparo de Tiago Alcántara que pego en el poste, pero eso sí creo que fue un gran juego del colombiano Luis Fernando Díaz y del egipcio Mohamed Salah.

Ahora tendrá que ir el Liverpool a finiquitar la semifinal con hasta el momento un marcador engañoso y no confiarse de un Villarreal que al parecer no querrá recibir más goles y se irá a encerrar y haber si en una de esas en contragolpe logran anotar. La verdad es que los dirigidos por Unai
Emery ya llegaron muy lejos, y no es por menospreciar pero se esperaba que dieran mejor batalla hoy en Liverpool.